Todas las relaciones, sin importar si son hetero, gay, lésbicas, trans, no binarias o más allá del binarismo, pasan por momentos donde la rutina le gana al deseo. Pero no te asustes: perder la chispa por ratitos no significa que se acabó el amor. A veces solo falta reconectar desde otros lados, experimentar juntos y volver a mirarse con emoción.

Aquí van ideas, juegos y consejos para revivir la magia ✨

1. Juegos para parejas: rompe el hielo, aunque lleven años

El juego no es solo para niñxs: también es clave para revivir el coqueteo, reírse y generar complicidad. Aquí unos clásicos (con twist queer):

1. Yo nunca, pero versión hot: perfecto para conocerse a fondo.
2. Preguntas 100% sinceras: tipo “¿Qué parte de mi cuerpo te gusta más?”, “¿Qué fantasía sexual no me has contado?”
3. Juego de roles: exploren nuevas dinámicas, identidades o estilos. Sirve tanto para reír como para encender el mood.
4. Citas falsas: salgan como si se conocieran por primera vez. Cero rutina, ¡puro misterio!

2. Comunicación: sexy y honesta

La chispa no siempre se apaga en la cama… a veces se enfría por no hablar.

1. Digan lo que sienten sin miedo ni juicio.
2. No supongan: si algo cambió, ¡pregunten con cariño!
3. Hablen de lo que les gusta, lo que no, lo que quieren probar.
4. Sean vulnerables: conectar emocionalmente hace que todo fluya mejor.

💡 Tip real: A veces un “oye, ¿te gustaría que planeemos una noche diferente esta semana?” abre más puertas que cualquier regalo caro.

3. Actividades fuera del guion

Cambiar de ambiente ayuda a cambiar de energía. Intenta esto:

1. Salida a un lugar nuevo (exposición, parque, café escondido).
2. Clases juntxs: baile, cerámica, cocina afrodisíaca… lo que se les ocurra.
3. Maratón de pelis LGBTQ+ con pijamas y snacks (sí, suena simple pero funciona).
4. Planear un mini viaje express, aunque sea al pueblo más random cerca de su ciudad.

✨ Lo importante no es el plan, sino el tiempo de calidad. Y si se desconectan del celular… ¡doble punto!

4. Reencuentro en lo íntimo (sí, en la cama también)

La rutina puede hacer que hasta el sexo se vuelva automático. Aquí va cómo reactivarlo:

1. Exploren nuevas zonas del cuerpo (¡no todo es genital!).
2. Jueguen con los tiempos: sexo lento, sin “final obligado”.
3. Prueben con juguetes, sensaciones, masajes eróticos.
4. O hagan un “día sin sexo” pero lleno de deseo (caricias, palabras, miradas).

🌟 El deseo se construye, se cuida y se reinventa. Sobre todo en relaciones largas.

5. Reconecten con su historia

Recordar el inicio puede despertar emociones que se creían dormidas.

1. Vean fotos, mensajes o lugares donde comenzaron.
2. Escriban una carta donde cuenten qué admiran del otrx.
3. Háganse una playlist del amor. Música que los conecta = energía que regresa.

La chispa no es un truco mágico. Es un fuego que se alimenta con pequeños gestos, risas, confianza y deseo compartido. Y en una pareja LGBTQ+, donde muchas veces han tenido que luchar contra estigmas o prejuicios, el amor también es una forma de resistencia.

Así que si sienten que la pasión bajó un poco, no se rindan ni entren en pánico. Tal vez es solo tiempo de reconectar, redescubrirse y volver a elegirse.